Mejora el equilibrio entre el corazón y el cerebro
Cuando estamos en BUENA FORMA EMOCIONAL, las respuestas de nuestro sistema nervioso son FLEXIBLES. En cambio, cuando estamos deprimidos, ansiosos o estresados, es probable que predominen respuestas de LUCHA o de HUÍDA. Podemos mostrarnos irascibles, hundidos, agotados. Llegados a ese punto, por más esfuerzo que hagamos, puede que sólo con la fuerza de voluntad no seamos capaces de cambiar el ritmo y restablecer el equilibrio. Sabemos que las personas que padecen DEPRESIÓN y ESTRÉS POST-TRAUMÁTICO, por ejemplo, presentan una desorganización…